🍁 Del otoño al invierno: cómo afecta el cambio de estación a nuestra salud

El paso del otoño al invierno es mucho más que un cambio de temperatura: es una transición profunda que influye en nuestro cuerpo, mente y estado de ánimo. A medida que los días se acortan y el frío se instala, nuestro organismo se adapta, y esa adaptación puede provocar desequilibrios si no prestamos atención a nuestras necesidades.

🌬️ Menos luz, menos energía

Durante el otoño y el invierno, la reducción de horas de luz solar afecta directamente a la producción de melatonina y serotonina, dos hormonas esenciales para regular el sueño, el apetito y el estado de ánimo.Esto puede traducirse en:

• Cansancio o somnolencia diurna.

• Dificultad para concentrarse.

• Cambios de humor o una leve sensación de tristeza (lo que se conoce como trastorno afectivo estacional).

  
  

💡 Consejo: Aprovecha al máximo la luz natural saliendo a caminar por la mañana o al mediodía. También puedes apoyarte con suplementos de vitamina D, siempre bajo recomendación profesional.

🦠 Un sistema inmunitario más vulnerable

El frío y los espacios cerrados facilitan la propagación de virus respiratorios como la gripe o el resfriado común. Además, el estrés, el cansancio y una alimentación más pobre en frutas y verduras frescas pueden debilitar nuestras defensas.

💡 Consejo: Refuerza tu sistema inmunitario con alimentos ricos en vitamina C (cítricos, kiwi, pimientos), zinc (semillas, frutos secos) y propóleo o equinácea, grandes aliados naturales contra las infecciones.

💧 Piel y mucosas más secas

Con la bajada de la humedad ambiental y el uso de calefacción, la piel tiende a resecarse y las mucosas se irritan más fácilmente.

💡 Consejo: Aumenta la ingesta de agua, usa aceites vegetales hidratantes (como el de almendras o rosa mosqueta) y añade infusiones calientes como rooibos, jengibre o canela, que hidratan y reconfortan.

💤 Escucha tu ritmo interior

En la naturaleza, el invierno es tiempo de descanso y renovación. Nuestro cuerpo también lo siente. Es normal necesitar dormir más, comer más caliente y bajar el ritmo.

💡 Consejo: Aprovecha este periodo para cuidar tu descanso, practicar actividades suaves como el yoga o la meditación, y dedicar más tiempo al autocuidado.

🌿 En resumen

El cambio de estación de otoño a invierno nos invita a cuidarnos desde dentro: nutrirnos mejor, reforzar nuestras defensas y permitirnos un ritmo más tranquilo. Si escuchamos a nuestro cuerpo, esta transición puede ser una oportunidad para fortalecer nuestra salud y equilibrio emocional.